Cada cierto tiempo aparecen nuevas dietas, todas prometiendo lo mismo: una pérdida de peso rápida y sin esfuerzo. Las llamadas dietas milagro imponen restricciones muy graves de calorías, y por lo general conducen a grandes deficiencias.
Hay que recordar que son imposibles de sostener a largo plazo, además de poder llegar a ser muy peligrosas para nuestra salud.
Lo nunca contado de las dietas milagro
Estas dietas se mueven más por el deseo de obtener un beneficio que por la promoción de una buena educación alimentaria.
Como para conceder los milagros ya está nuestra querida señora de Lourdes, desde EPDH te damos una señal de advertencia para mantener en guardia tu salud.
¿En qué se basan?
Las dietas milagro son prescritas por personas ajenas al campo de la nutrición. Estos regímenes se caracterizan por la pequeña cantidad de calorías que proporcionan.
En este estado de semi-ayuno, el cuerpo reacciona mediante el aumento de la descomposición de las proteínas corporales como una fuente alternativa de energía.
¿Qué peligros para la salud acarrean?
La rápida pérdida de la masa muscular se traduce en la formación de cuerpos cetónicos. Si se producen durante un periodo prolongado de tiempo, estos cuerpos pueden llegar a ser muy peligrosos.
Otro problema con estas «dietas milagro» es que, cuando llegan a su fin, se traducen en la recuperación rápida del peso perdido (efecto rebote), dando lugar al denominado fenómeno yo-yo.
Por si fuera poco, estas situaciones de semi-ayuno desencadenan mecanismos neuroendocrinos potentes que luchan contra la pérdida de peso. Éstos incluyen el aumento de la eficiencia metabólica, el ahorro de energía y el aumento del apetito.
Esto hace que el peso perdido sea repuesto tan pronto como la persona comienza a comer «normalmente» y, además, el peso recuperado se almacena predominantemente como tejido graso.
¿Qué tipo de dietas son?
En general, las llamadas dietas milagro se pueden agrupar en tres categorías principales:
a) Las dietas hipocalóricas y desequilibradas: como la dieta de la Clínica Mayo.
Estas dietas causan un efecto rebote que se traduce en un aumento del tejido graso. Además son generalmente monótonas, dando lugar a numerosas deficiencias de nutrientes, especialmente si se mantienen a lo largo de un período prolongado de tiempo.
b) Las dietas disociadas: como la dieta de Hollywood o la Antidieta.
Estas dietas defienden que los distintos grupos de nutrientes almacenados en distintos alimentos no contribuyen al aumento de peso por ellos mismos, sino sólo cuando se comen en combinación.
c) Dietas de exclusión: éstas se basan en la eliminación en la dieta de un nutriente en particular.
Riesgos para la salud de las dietas milagro
En resumen, las dietas muy restrictivas que son muy bajas en calorías, a pesar de la pérdida de peso que se puedan facilitar a corto plazo, constituyen un riesgo inaceptable para la salud ya que pueden:
1.- Agravar el riesgo metabólico de una persona.
2.- Provocar desnutrición proteica y deficiencias de vitaminas y minerales.
3.- Conducir a trastornos de la alimentación (anorexia y bulimia), que son a veces más peligrosos que el exceso de peso que se está tratando de perder.
4.- Producir efectos psicológicos negativos.
5.- Fomentar el efecto rebote.
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